El hogar refleja la personalidad y el carácter de quienes lo habitan, por lo que es esencial decorar tu primer departamento todos se sientan cómodos en él. Si sus gustos son similares, elegir un estilo de decoración será sencillo; pero si sus preferencias son muy diferentes, tendrán que hacer un esfuerzo por encontrar un punto en común. Esto podría incluir intereses compartidos, como el gusto por las plantas, la música, los viajes o la fotografía.

La importancia de planificar y presupuestar
Una vez que tengan una idea clara de lo que les gusta y lo que prefieren evitar, es momento de pensar en lo que realmente necesitan. Es fundamental establecer un presupuesto para saber cuánto están dispuestos a gastar y, sobre todo, en qué invertir. Si no tienen claro cuánto tiempo van a permanecer en su nuevo hogar, es recomendable evitar grandes inversiones en muebles que solo funcionen en ese espacio en particular. Lo mejor es empezar por adquirir muebles básicos y de calidad, como una buena cama y un sofá, que puedan acompañarlos por muchos años.
Qué conservar y qué no
Es probable que muchas cosas de sus anteriores departamentos, o incluso de la casa de sus padres, aún les resulten útiles. También podrían heredar muebles, vajillas, utensilios prácticos o decoraciones vintage de casa de los abuelos, piezas que pueden aportar mucho estilo y valor sentimental. Lo ideal es seleccionar objetos funcionales y aquellos que tengan un significado especial.

Espacios individuales
Aunque decoren juntos su hogar para que refleje su estilo y energía, es importante que cada uno conserve un espacio con su toque personal. Es posible que al principio no cuenten con suficientes metros cuadrados para tener áreas completamente individuales, pero pueden acordar tener pequeños rincones que reflejen su personalidad, como el espacio de la pared sobre la mesita de noche de cada uno, por ejemplo.
Al final para decorar tu primer departamento, lo importante es que el hogar sea un lugar donde se sientan representados y a gusto.